Limarí, 14 de octubre de 2009.- Un total de 4.766 kilos de caracoles de tierra vivos ha enviado a Italia entre septiembre y octubre de este año la empresa limarina Álamo Blanco, dedicada a la exportación de este producto desde diciembre del año pasado. En tanto, 6.285 kilos han sido despachados a España y 1.100 a Francia.
Según Eduardo Fuentealba, Jefe de la Oficina Limarí del Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, entidad dependiente del Ministerio de Agricultura y encargada de la inspección de los embarques, la apertura del mercado italiano constituye un hito a nivel nacional. Una pequeña empresa, apoyada por el SAG, logró penetrar por primera vez un mercado aún inexplorado para este producto. Queremos destacar que ésta es la primera empresa del país que logra entrar a un mercado tan exigente como el italiano. Esto indudablemente abre las puertas a otros productores.
Por su parte, Paolo Gecele, Encargado Provincial de Protección Pecuaria del SAG Limarí, señaló que para lograr la exportación a Italia se debió hacer todo un trámite aprobando la sala de acondicionamiento para cumplir con un completo protocolo, que incluyó una serie de requisitos de infraestructura e higiene que garantizara la calidad del producto. Además, aparte del certificado zoosanitario de exportación, que se hace para cualquier producto a cualquier destino, se exige un certificado sanitario especial.
Los profesionales del SAG indicaron que previamente, el plantel debió inscribirse en el Servicio de Salud de Italia, trámite realizado por el Servicio.
Cristián Sabelle, Encargado Regional de Protección Pecuaria, enfatizó que el SAG de la Región de Coquimbo realizó la coordinación entre la Oficina Limarí, los interesados y la Unidad de Comercio de la División de Protección Pecuaria del Servicio. Con ellos, le cupo desarrollar la comunicación con sus pares italianos a fin de resolver y facilitar la tramitación de esta solicitud de la empresa limarina. Se debe recordar que cumplir los requisitos sanitarios de ingreso a los mercados extranjeros es determinante para el éxito de iniciativas productivas y comerciales de empresas del rubro agropecuario. Por esta razón el SAG cumple el rol de certificador de la producción agropecuaria exportable y a la vez facilitador de la misma mediante la comunicación directa y en ambos sentidos que realiza entre sus niveles sectorial, regional y nacional y sus contrapartes, es decir los servicios de sanidad animal y vegetal de los países extranjeros, indicó.
Hasta la fecha, el SAG ha realizado 12 certificaciones sanitarias de la producción exportable de la planta mencionada, 10 de ellas realizadas en la provincia de Limarí (4 con destino a Italia y 6 a España) y 2 en la Región Metropolitana (1 con destino a Francia y 1 a España). Dichas certificaciones han cubierto el total del volumen exportado a Europa.
Innovación
Alvaro Rojas, Gerente Comercial y de Operaciones de la empresa explica que decidieron dedicarse a este rubro debido a La necesidad de buscar una actividad productiva novedosa para la exportación, que se enmarcara dentro de nuestras afinidades y en los recursos disponibles para emprender.
Sobre el apoyo del SAG indica que fue fundamental, junto al esfuerzo de otras agencias importantes del Estado de Chile así como del Estado Italiano en romper las barreras burocráticas que no habían hecho posible exportar éste y otros productos a Italia en particular. Fue muy estimulante cooperar con el SAG en cuanto a conseguir facsímiles de documentación necesaria, traducirla y adaptarla a los usos del país, tanto de origen (nosotros), como de destino (Italia). En ese sentido, la participación del SAG a través del Ministerio de Agricultura en la relación directa con las autoridades del Ministerio de la salud de Italia fue fundamental, en tanto PROCHILE mantenía estables los vínculos comerciales con nuestros clientes para asegurarles el interés de Chile en esta materia.
La empresa Álamo Blanco genera 6 empleos directos y 32 indirectos y espera seguir ampliando nuestros mercados y agregar valor al producto en la medida que contemos con el apoyo de los organismos pertinentes, señaló Alvaro Rojas.
Algunas Cifras
Según información de ProChile, China y Francia son los principales importadores de caracoles de tierra a nivel mundial, seguidos de España, Italia y Hong Kong. España consume cerca de 14 mil toneladas al año de este producto.
A su vez, China y Francia son los primeros consumidores del mundo se estima que consumen más de 20 mil toneladas por año cada uno- pero a la vez son los mayores productores, de tal forma que se autoabastecen en una proporción mayoritaria.
Los principales usos de este producto son la alta gastronomía, cosmetología, paté, conservas y productos adquiridos principalmente por empresas especializadas y gourmet.
Fuente SAG
